Fotogalería: Tragedia en Hawaii

En un impactante giro de los acontecimientos, el estado de Maui, Hawaii, ha sido testigo del incendio más mortífero en Estados Unidos en los últimos 100 años. La cifra de víctimas se ha elevado a casi 100 personas fallecidas a raíz de las implacables llamas que han asolado la región. Sin embargo, este sombrío recuento solo representa el 25% de la devastación total, ya que los equipos de rescate luchan para explorar las zonas más afectadas.

En una conferencia de prensa con un tono de disculpa, el gobernador Josh Green lamentó la lentitud en la recuperación de restos mortales, pero expresó su determinación de acelerar el ritmo de las operaciones. Por su parte, John Pelletier, jefe de la policía de Maui, detalló que hasta ahora se ha inspeccionado solamente una cuarta parte de la localidad de Lahaina, que ha sufrido el mayor impacto por los incendios.

Las autoridades han anunciado que a partir de este martes comenzarán a hacer públicos los nombres de los fallecidos, siempre y cuando sus familias hayan sido notificadas previamente. A medida que prosiguen las labores de rescate, apoyadas por 20 perros y personal de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA), se teme que la cifra de víctimas aumente aún más, como ha advertido el gobernador en días recientes.

Tanto FEMA como el Centro de Desastres del Pacífico (PDC, por sus siglas en inglés) han evaluado que la reconstrucción de Lahaina demandará un mínimo de 5,520 millones de dólares. Este desastre ha dejado una cicatriz profunda en la historia, marcando el incendio más letal en un siglo en Estados Unidos, mientras cientos de personas aún permanecen desaparecidas, añadiendo una nota de angustia a esta trágica situación.