El 31 de mayo de 2024, un grupo armado irrumpió en la localidad purépecha de Santa Fe de la Laguna, Michoacán. Los atacantes desarmaron a la Guardia Comunal y realizaron disparos al aire en la plaza principal, donde resultó herido un miembro de la guardia. A pesar de la gravedad del incidente, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla aún no ha emitido una postura oficial.
El Consejo Supremo Indígena de Michoacán denunció el ataque y la falta de respuesta del gobierno estatal. Ante esta situación, los habitantes bloquearon la carretera Quiroga-Zacapu en demanda de apoyo de la Guardia Nacional.
Este ataque subraya la inseguridad prevalente en la región, donde operan cárteles como el CJNG y Los Caballeros Templarios. La falta de acción por parte del gobierno de Morena ha generado críticas y preocupación entre los ciudadanos.
La población exige medidas concretas para enfrentar la violencia y proteger a las comunidades indígenas, que se encuentran desamparadas ante el creciente poder del crimen organizado en la región.
Este incidente es un recordatorio de la necesidad urgente de una estrategia de seguridad más efectiva y un compromiso real de las autoridades para garantizar la paz y la justicia en Michoacán.