En Pachuca, cerca de cuatro de cada diez negocios establecidos en locales formales operan en la informalidad, situación que no solo afecta la recaudación de impuestos, sino que también impide a los comercios aprovechar beneficios a los que podrían acceder de estar registrados. Así lo confirmó la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño (Canacope) de la capital hidalguense.
Carlos Gamiño Ríos, presidente de Canacope Pachuca, detalló que existen tres tipos de establecimientos: fijos, semifijos y ambulantes. Sin embargo, incluso los locales fijos —que suelen asumirse como negocios formales— no siempre están dados de alta ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT). “Muchos creen que por tener un local ya son negocios formales, pero cerca del 40 por ciento de estos locales siguen en la informalidad”, señaló.
Gamiño explicó que esta situación no es exclusiva del comercio ambulante o semifijo, como se suele pensar. En realidad, gran parte de los negocios informales establecidos en locales son tiendas de abarrotes, zapaterías, tiendas de ropa y bisuterías, ya que es sencillo abrir negocios de este tipo sin regularización.
Para combatir esta problemática, la cámara ha impulsado campañas de información sobre los beneficios de la formalidad, como el acceso a programas de apoyo gubernamental que pueden ayudar a los pequeños empresarios. “Hay muchos programas que pueden beneficiarnos como empresarios”, reiteró Gamiño, subrayando la importancia de regularizarse.
Con esta estrategia, la Canacope Pachuca espera reducir el porcentaje de negocios informales y mejorar las condiciones del comercio en la capital.