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En un emotivo acto que buscaba brindar el último adiós y resaltar el invaluable legado dejado por la líder de los artesanos, María Fernanda Niño Torres, quienes la recordarán con gratitud, pobladores y compañeros artesanos se congregaron para rendir un sentido homenaje póstumo en la Plaza de las Artesanías de Tula de Allende. La líder falleció repentinamente, aparentemente a causa de un infarto.
Los restos de Niño Torres llegaron al recinto artesanal en la céntrica calle Zaragoza alrededor de las nueve de la mañana de ayer, martes. Entre sus familiares, amigos y colegas, fueron recibidos con aplausos, realizando un recorrido por las instalaciones antes de iniciar el tributo.
María de Lourdes Montoya, destacada artesana, compartió unas palabras en las que enfatizó la incansable lucha de María Fernanda Niño por el bienestar de los artesanos de Tula, logrando un reconocimiento internacional para los creadores del arte prehispánico en vida, dejando así un valioso legado para todos.
Rosalía Chávez Osorio recordó con admiración la dedicación de la fallecida líder durante la inundación del año 2021, donde Niño Torres no escatimó esfuerzos para ayudar a sus compañeros artesanos a salir adelante. “Trabajaba incansablemente, organizándose para asegurar espacios en exposiciones artesanales y velando siempre por el bienestar de este lugar durante muchos años”, mencionó.
Clara Guadalupe Soto, amiga y compañera de labores, resaltó el compromiso diario de la líder en la ejecución de proyectos que beneficiaron a los creadores del arte prehispánico de Tula.
Héctor Estrada, al referirse cariñosamente a la fallecida como “Doña Fer”, destacó su gran amor por la cultura y la Plaza de las Artesanías. Subrayó que fue un ejemplo de fortaleza y lucha, siempre defendiendo con causa y corazón a este gremio de la sociedad.
Después de la emotiva despedida en la Plaza de las Artesanías, el féretro fue trasladado a la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús en la colonia San José, donde se celebró una misa en su honor antes de su sepultura en el cementerio del mismo sector habitacional.
María Fernanda Niño Torres, oriunda de Coahuila y residente de la colonia Barrio Alto durante muchos años, lideró la Plaza de las Artesanías desde el año 2002. Su incansable gestión en favor de los artesanos logró el reconocimiento internacional para los creadores del arte prehispánico de Tula. La líder falleció a la edad de sesenta y siete años.
