El huracán Dora se ha fortalecido rápidamente en el Pacífico oriental, pasando de una depresión tropical a tormenta tropical y, finalmente, a huracán en cuestión de horas. Según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, Dora presenta vientos de 120 km/h con ráfagas más rápidas y se desplaza hacia el oeste a una velocidad de 16 km/h.
Afortunadamente, en este momento, el huracán Dora no representa una amenaza para tocar tierra. Se prevé que continúe su trayectoria hacia el oeste y se fortalezca aún más, llegando a convertirse en un huracán mayor para el jueves por la mañana.
Pese a su intensificación, los expertos pronostican que Dora comenzará a debilitarse durante el fin de semana, aunque aún mantendrá la categoría de huracán hasta el domingo. Sin embargo, para ese día, se encontrará mucho más lejos de la costa, alejándose de cualquier territorio.
Actualmente, Dora es el cuarto huracán que se forma en la temporada ciclónica del Pacífico oriental. Aunque no representa una amenaza directa en tierra, las autoridades y población costera deben mantenerse alerta y monitorear su desarrollo en caso de cambios inesperados.
El Centro Nacional de Huracanes continuará emitiendo actualizaciones regulares sobre el comportamiento y trayectoria de este fenómeno natural. Es importante que las personas en áreas potencialmente afectadas por huracanes sigan las indicaciones de las autoridades y tomen las precauciones necesarias para protegerse ante posibles eventos meteorológicos adversos.