En un histórico acuerdo, la arquidiócesis de Los Ángeles ha decidido desembolsar 880 millones de dólares para compensar a las víctimas de abusos sexuales cometidos por el clero, en casos que se remontan a varias décadas. Este monto, considerado el mayor acuerdo de su tipo en la historia de la Iglesia Católica en Estados Unidos, fue anunciado este miércoles tras intensas negociaciones.
El arzobispo José H. Gómez expresó su profundo pesar en un comunicado: “Lamento profundamente cada uno de estos terribles incidentes”. Además, añadió que espera que este acuerdo pueda ofrecer algún grado de sanación a quienes han sufrido: “Confío en que esta resolución proporcionará una compensación justa para los sobrevivientes de estos abusos”.
El acuerdo fue alcanzado después de meses de conversaciones entre los abogados de 1.353 personas que denunciaron haber sido víctimas de abusos por parte de sacerdotes locales, y la arquidiócesis. Según Los Angeles Times, este acuerdo marca el cierre de un ciclo de litigios que se ha extendido por más de 25 años, poniendo fin a uno de los capítulos más oscuros de la institución católica en Estados Unidos.
Este no es el primer acuerdo de la arquidiócesis. En años anteriores, ya había pagado 740 millones de dólares en diferentes acuerdos con otras víctimas, lo que eleva el total pagado por estos casos a más de 1.500 millones de dólares.
Los abogados del Comité de Enlace de Demandantes destacaron que, si bien “ninguna cantidad de dinero podrá devolver lo que estas valientes personas perdieron”, este acuerdo representa un paso hacia la justicia y la rendición de cuentas.
El abogado Morgan Stewart, quien lideró las negociaciones, subrayó la magnitud del acuerdo, calificándolo como el mayor acuerdo individual en casos de abuso sexual infantil en una arquidiócesis católica. “Estos sobrevivientes han cargado con el peso de estos traumas durante décadas. Muchos de ellos ya no están con nosotros, y otros están envejeciendo, al igual que quienes tenían conocimiento de estos abusos dentro de la Iglesia. Ya era momento de ponerle fin a esto”, declaró Stewart al Times.
El pago de este acuerdo será cubierto por un fondo compuesto de inversiones de la arquidiócesis, reservas acumuladas, financiamiento bancario y otros activos. Además, algunas órdenes religiosas involucradas en los casos también contribuirán a los costos, según informó el Times.
Este acuerdo representa un paso importante en el largo camino hacia la justicia para las víctimas de uno de los mayores escándalos de la Iglesia Católica en Estados Unidos.