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En un giro increíble, un grupo de rescatistas estaba rumbo a una emergencia cuando, de repente, escucharon una voz pidiendo auxilio en medio de las oscuras aguas del Mediterráneo. Al acercarse, ¡se toparon con algo sorprendente!
Una niña de 11 años flotaba sola en el mar. Originaria de Sierra Leona, llevaba alrededor de su cintura dos neumáticos llenos de aire, usados como chalecos salvavidas, junto con un simple flotador. Estuvo en el agua durante tres días tras un naufragio que dejó en la deriva a los pasajeros de una embarcación que había zarpado desde Sfax, Túnez, hacia Italia.
Según la organización Compass Collective, que estuvo a cargo del rescate el miércoles cerca de Lampedusa, Italia, la pequeña explicó que el bote de metal donde viajaba se hundió por completo tras una tormenta feroz. Ella y otras dos personas intentaron mantenerse juntas en el mar, pero al final perdió el contacto con ellas.
En la embarcación iban unas 45 personas, entre ellas su hermano, pero según los rescatistas, ella parece ser la única sobreviviente del desastre. “Supuestamente las otras 44 personas se ahogaron”, comentó la ONG.
Un rescate de película. 🎬
El capitán del barco, Matthias Wiedenlübbert, no pudo contener su asombro cuando relató cómo, pese al ruido del motor, lograron escuchar la voz de la niña pidiendo ayuda. “Fue una coincidencia increíble“, expresó.
Luego del hallazgo, la tripulación rastreó la zona con la esperanza de encontrar a más sobrevivientes, pero, tras días de tormentas y olas gigantes, la esperanza se fue desvaneciendo.
Cuando fue rescatada, la niña llevaba varios días sin comida ni agua, y su salud estaba muy comprometida por la hipotermia. Sin embargo, sorprendentemente, se mostró capaz de caminar y hablar después de recibir atención médica en Lampedusa.
Poco después del rescate, barcos de la Guardia Costera y la Policía Italiana continuaron buscando más sobrevivientes en el área donde ocurrió la tragedia, pero hasta el momento no han tenido suerte.
Una crisis que no para.
Según la Organización Internacional para las Migraciones, ya son más de 30,000 las personas que han muerto o desaparecido intentando cruzar el Mediterráneo en los últimos diez años. A pesar de esto, miles de migrantes siguen intentando este peligroso trayecto, y solo en lo que va del año más de 63,000 han llegado a Italia.
Aunque las políticas estrictas del gobierno italiano de Giorgia Meloni han reducido en parte los flujos migratorios, los riesgos siguen siendo altísimos para quienes deciden tomar esta ruta.
