En una escalada de tensiones, el ejército de Israel ha reiniciado sus ataques en la Franja de Gaza, rompiendo una tregua que había estado vigente durante la última semana. La ofensiva incluye bombardeos aéreos y combates en tierra entre las fuerzas israelíes y los combatientes palestinos en la ciudad de Gaza. La acción militar se desencadenó minutos después de que expirara el alto el fuego acordado con la mediación de Qatar y Egipto.
Las autoridades de Tel Aviv responsabilizan a Hamas por la ruptura del cese al fuego, alegando que el grupo disparó contra territorio israelí. La reactivación del conflicto se produce después de que Hamas liberara a ocho rehenes, entre ellos la mexicana-israelí Ilana Gritzewsky Camhi, secuestrada en octubre. Como parte de un intercambio, Israel liberó a 30 prisioneros palestinos.
Los ataques se concentran en distintas áreas de Gaza, incluyendo el sur, donde se han lanzado bombardeos aéreos, y el noreste, con intensos combates y artillería. En el centro, tanques israelíes han atacado cerca de campos de refugiados. Las Fuerzas de Defensa de Israel han informado de lanzamientos de cohetes desde Gaza hacia su territorio.
La tregua anterior permitió la liberación de más de 100 rehenes, en su mayoría israelíes, a cambio de la excarcelación de 240 palestinos detenidos en Israel. A pesar de los esfuerzos de Qatar y Egipto para extender la tregua, la falta de rehenes en Gaza dificultó el acuerdo para una nueva prórroga.
Israel, bajo presión de Estados Unidos, enfrenta llamados para proteger a los civiles palestinos durante la reanudación de los ataques. El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, ha instado a Israel a actuar conforme al derecho internacional humanitario y garantizar la protección de los civiles en Gaza.
Blinken, en una reunión con líderes israelíes, expresó su esperanza de ampliar el alto el fuego y liberar más rehenes. Además, condenó la violencia contra civiles palestinos en Cisjordania y se comprometió a abogar por la rendición de cuentas de los responsables.