La Comisión de Participación Comunitaria de las colonias Hipódromo y Condesa ha alzado su voz exigiendo la restauración del Foro Lindbergh, el cual ha sido víctima de actos vandálicos. Además, demandan mayor seguridad en la zona.
Los miembros de esta comisión han expresado su descontento por la falta de respuesta ante su solicitud de presencia policial, la cual realizaron al número de emergencia 911. Están buscando respuestas de la Secretaría de Seguridad Ciudadana sobre la razón por la que no se atendió su llamado para prevenir actos vandálicos.
Ante la falta de servicios policiacos y limitaciones de la Alcaldía Cuauhtémoc en cuanto a seguridad, se está considerando la posibilidad de entablar una controversia legal contra la administración de la ciudad.
La Alcaldesa Sandra Cuevas, consciente de la situación, ha instado al Gobierno capitalino a tomar medidas para detener el vandalismo en los espacios públicos. En particular, ha enfocado su atención en el Foro Lindbergh, que ya está siendo intervenido para eliminar las pinturas y escrituras en sus paredes.
Sin embargo, la falta de acción por parte de la Secretaría de Seguridad Ciudadana ha sido denunciada. Los elementos asignados a la Alcaldía parecen haber recibido instrucciones de no intervenir ni reaccionar ante los actos vandálicos que ocurren en la demarcación.
La serie de actos de vandalismo se ha extendido a lugares como el Jardín de las Artes Gráficas, el Mercado Beethoven y el edificio de la Alcaldía. Ante esta situación, la alcaldesa ha solicitado a Omar García Harfuch, secretario de Seguridad Ciudadana, que tome medidas con sus elementos para abordar el problema.
A pesar de esto, los funcionarios adscritos a la Alcaldía no solo se enfrentan al vandalismo, sino también a la responsabilidad de mantener las cámaras de videovigilancia operativas.
Un grupo de trabajadores de la Dirección de Servicios Urbanos de la Alcaldía, integrado por Consuelo Espinosa, Guadalupe Guerrero, Ana María Ponce, Esperanza Espinosa y Jorge, está trabajando arduamente para eliminar las pintas y pegotes que los vándalos han dejado en el monumento.
El equipo de limpieza, conformado por individuos de edades entre 66 y 76 años, lamenta que los jóvenes inviertan su tiempo en acciones destructivas en lugar de actividades más constructivas.
A pesar de los obstáculos, estos trabajadores se mantienen comprometidos con su labor de mantener los espacios públicos en buenas condiciones para el disfrute de todos.
Alejandro Guzmán, jefe de la cuadrilla, detalló que los trabajos de limpieza se llevarán a cabo durante la semana laboral, y que se esforzarán por dejar los espacios en su mejor estado.
El llamado a detener el vandalismo y a mejorar la seguridad en los espacios públicos continúa resonando en la comunidad de Cuauhtémoc.