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En un tercer día marcado por la desesperación, la caravana éxodo de la pobreza clama por el respaldo del gobierno de Oaxaca, acusando abandono y falta de atención. Rosa Vásquez, coordinadora del grupo, desmintió al secretario de Gobierno, Jesús Romero López, quien afirmó haber brindado ayuda en el Istmo de Tehuantepec.
Con casi 3 mil personas, incluyendo 700 menores de edad, la caravana busca apoyo, especialmente en transporte, pero denuncia que el gobierno estatal liderado por Salomón Jara ha ignorado sus solicitudes. Vásquez agradeció la ayuda de organizaciones civiles y residentes de San Pedro Tapanatepec, quienes han ofrecido su respaldo.
A pesar de la difícil situación de los migrantes, las autoridades oaxaqueñas se niegan a proporcionar transporte, argumentando que hacerlo sería ilegal. El secretario Romero López anunció que no se proporcionarán camiones ni salvoconductos; si quieren avanzar por el estado, deberán hacerlo a pie.
La coordinadora de la caravana expresó su descontento ante esta decisión y destacó que la mayoría de los participantes, incluidos los menores, tienen lesiones en los pies. Ante la negativa del gobierno, advirtió que iniciarán una huelga de hambre, subrayando que migraron por necesidad, huyendo de la violencia y la pobreza.
Con casos de insolación, desmayos y pies lastimados, la situación humanitaria de la caravana se agrava, mientras las autoridades estatales parecen mostrar indiferencia ante sus penurias.
