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Un contingente compuesto por al menos 100 efectivos de las Fuerzas Especiales del Ejército ha llegado al estado de Nuevo León en respuesta a la creciente ola de violencia e inseguridad que ha afectado a la región en los últimos meses.
Este despliegue militar se produce después de que el martes se registrara la jornada más violenta del año, con la ejecución de 17 personas, de las cuales 12 fueron mutiladas y posteriormente arrojadas en bolsas de plástico y en hieleras en varios sectores de la entidad.
Los militares arribaron a Nuevo León a bordo de un avión Boeing 737 de las Fuerzas Armadas, aterrizando en la Terminal B del Aeropuerto Internacional Monterrey poco antes de las 08:00 horas, partiendo previamente de la Base Aérea Militar 1 en Santa Lucía, Ciudad de México.
Fueron trasladados a la zona metropolitana de Monterrey en 13 camionetas y un camión del Ejército para llevar a cabo un primer reconocimiento del área.
Estos efectivos del Ejército están altamente capacitados, cuentan con armamento, equipo especializado y entrenamiento adecuado para abordar diversas situaciones, lo que los convierte en una fuerza especializada.
Antes de la llegada de las tropas, la noche anterior se produjo un ataque armado en un bar del casco municipal de San Pedro Garza García, en el que una persona perdió la vida y otras cuatro resultaron heridas. Hombres armados irrumpieron en el Bar El Cereso, ubicado en la Avenida Vasconcelos y Naranjo, dejando como resultado un cliente fallecido y tres heridos, además del dueño del bar. Las autoridades encontraron numerosos casquillos en la escena del crimen, aunque no se ha especificado el calibre de las armas utilizadas.
