El presidente Andrés Manuel López Obrador denunció como un acto de traición a la patria la supuesta ayuda del Poder Judicial de la Federación (PJF) a empresas extranjeras que buscan revocar la ley de la industria eléctrica. Esta acusación se produce en medio de una creciente controversia sobre la reforma energética y los amparos presentados por varias compañías en contra de esta normativa.
El mandatario manifestó su preocupación por la aparente alianza entre el PJF y fuerzas conservadoras que buscan consolidar la reforma energética y privatizar activos públicos. López Obrador recordó que durante los gobiernos de Carlos Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo se iniciaron los procesos de privatización eléctrica mediante leyes secundarias que permitían la inversión extranjera, sin que el PJF se pronunciara en contra en ese momento.
El presidente elogió la decisión de Adolfo López Mateos en 1960 de nacionalizar la industria eléctrica y aprovechó la ocasión para criticar al Poder Judicial y la Suprema Corte de Justicia de la Nación, especialmente a los ministros Luis María Aguilar y Alberto Pérez Dayán, a quienes calificó como ultras dentro del conservadurismo. López Obrador reafirmó su compromiso de seguir denunciando y presionando para reformar el Poder Judicial.