El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha expresado su desaprobación hacia el derroche de publicidad en espectaculares por parte de los aspirantes de Morena. López Obrador, quien tiene influencia en el proceso de sucesión en el partido, ha señalado que el excesivo gasto en publicidad es característico de los políticos conservadores y ha pedido a los candidatos que opten por una campaña austera, cercana al pueblo y sin derroche de recursos. Durante su conferencia de prensa diaria, el mandatario ha exhortado a los candidatos a no seguir los mismos pasos que los conservadores y ha mencionado específicamente a Claudio X. González, empresario opositor. López Obrador ha afirmado que desconoce si los aspirantes están financiando los espectaculares con sus propios recursos, pero ha indicado que si lo están haciendo, considera que no están actuando de manera correcta.
El gasto en espectaculares realizado por los candidatos de Morena no ha sido transparentado y podría convertirse en un factor de riesgo para la unidad interna del partido. El senador Ricardo Monreal, uno de los aspirantes presidenciales, ha acusado a Claudia Sheinbaum, exjefa de Gobierno de Ciudad de México, y a Adán Augusto López, exsecretario de Gobernación, de derrochar recursos en este tipo de publicidad. Monreal ha revelado que ha contado 915 espectaculares en 14 estados, aproximadamente la mitad del territorio nacional. El senador ha enviado una carta al dirigente de Morena, Mario Delgado, solicitando que la dirigencia del partido exija a los candidatos retirar todos sus anuncios. Hasta el momento, Delgado no ha respondido a esta petición, según Monreal. Mientras tanto, los aspirantes han guardado silencio ante el derroche de recursos. Adán Augusto ha declarado que los espectaculares a su favor han sido colocados sin su autorización, mientras que Ebrard y Sheinbaum han afirmado que una editorial es responsable de los anuncios que promocionan sus libros (la editorial, Penguin Random House, ha negado haber pagado por esa publicidad).
López Obrador finalmente ha intervenido en la disputa y ha expresado su desaprobación. Ha afirmado que no está de acuerdo con el gasto excesivo en publicidad y ha instado a sus compañeros de partido a no dejarse llevar por las nuevas modas de estrategas y asesores de imagen. El presidente ha señalado que los publicistas carecen del conocimiento de las pasiones y sentimientos del pueblo de México, ya que no conocen el país ni han visitado las comunidades ni hablado con la gente. López Obrador ha recordado sus inicios en la lucha de izquierda y ha descrito la campaña que le gustaría ver en los aspirantes a sucederlo, basada en el contacto directo con la gente y el trabajo puerta a puerta. El mandatario ha destacado la eficacia de este enfoque y ha enfatizado la importancia de establecer un diálogo con la gente. También ha aprovechado la conferencia para criticar nuevamente a la senadora Xóchitl Gálvez, candidata presidencial de la coalición Va por México, conformada por el PAN, PRI y PRD, y ha señalado que las estrategias publicitarias ya no funcionan y que es necesario considerar el origen del dinero utilizado en las campañas.