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El gobierno federal ha anunciado un despliegue de 9,860 elementos de la Guardia Nacional en Acapulco, Guerrero, como parte de un plan de seguridad para fortalecer la protección en el municipio. Aunque esta medida podría parecer significativa, expertos en seguridad advierten que un aumento en la presencia de personal militar no necesariamente se traduce en una disminución de la delincuencia. En lugar de un enfoque centrado únicamente en el número de efectivos, sugieren la implementación de un plan integral para abordar la crisis de seguridad en la región.
Guerrero ahora cuenta con 14,620 efectivos de la Guardia Nacional, superando a Guanajuato, que cuenta con 6,670 elementos. A pesar de este aumento en la presencia militar, algunos expertos consideran que no se garantiza una mejora sustancial en la seguridad a corto plazo.
Jonathan de Vicente, director de Incidencia Política de México Unido Contra la Delincuencia, señaló que el reciente asesinato de 13 policías en Coyuca de Benítez refleja una crisis de seguridad en el estado, y expresó preocupación por la falta de mejoras notables en la seguridad a pesar del despliegue de elementos de la Guardia Nacional.
De Vicente también destacó la necesidad de involucrar a otros actores importantes en la impartición de justicia, como la Fiscalía Estatal y los Ministerios Públicos, y pidió al gobierno que elabore un plan de seguridad que vaya más allá de la militarización.
El anuncio del gobierno federal fue considerado “bastante lento” por Javier Oliva Posada, quien también cuestionó la estrategia de seguridad de la administración local encabezada por Evelyn Salgado Pineda.
Además, no está claro cuál será el costo de construcción de cada nuevo cuartel de la Guardia Nacional. Datos de 2021 indican que el presupuesto de construcción era de 34.2 millones de pesos, mientras que se destinaron 7.8 millones para el equipamiento.
En resumen, aunque el aumento en el número de elementos de la Guardia Nacional es una medida importante, los expertos sugieren que se requiere una estrategia integral que involucre a diversos actores y enfoques para abordar de manera efectiva la crisis de seguridad en Acapulco y Guerrero.
