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¡Vaya sorpresa! Melania Trump ha estado un poco ausente en la campaña de este año, pero en una de sus escasas apariciones, ¡recibió un cheque de seis cifras! No es común ver a la esposa de un candidato en este tipo de situaciones.
La ex primera dama participó en un par de eventos de recaudación de fondos para los Log Cabin Republicans, donde se llevó US$ 237,500 por un acto realizado en abril, según el último formulario de declaración financiera de Donald Trump. Este pago fue clasificado como un “compromiso de discurso”.
En el formulario reciente, se menciona que Melania recibió el pago de los Log Cabin Republicans por el evento de abril. Pero aquí viene lo intrigante: no se sabe quién realmente firmó ese cheque. Charles Moran, presidente del grupo, comentó que ellos no financiarían su intervención, y el documento de divulgación no aclara la fuente del dinero.
Antes de otra recaudación en julio, se mencionó que se hizo una solicitud a un donante para un pago similar, pero no hay claridad si Melania finalmente cobró. La campaña aún no ha hecho pública la declaración financiera correspondiente a ese periodo. Se dice que Ric Grenell, exembajador en Alemania y aliado de Trump, fue quien gestionó la solicitud para Melania. Además, ha estado ayudándola en otros proyectos comerciales.
Expertos en ética y financiación de campañas han señalado que es bastante inusual y éticamente cuestionable que el cónyuge de un candidato presidencial reciba dinero por aparecer en eventos de recaudación de fondos. Virginia Canter, consejera jefe de ética de Citizens for Responsibility and Ethics, expresó que “parece bastante egoísta” y que no es algo común de ver.
Si realmente el grupo no pagó a Melania, el formulario de Trump podría estar infringiendo normas éticas, ya que debió indicar quién cubrió sus honorarios. “Si indicas que fue un pago por un discurso para los Log Cabin Republicans, también tienes que informar quién fue el que pagó. Sin eso, es imposible evaluar posibles conflictos de interés”, explicó Canter.
Algunos cercanos a Melania, que asistieron a los eventos, defendieron su decisión de cobrar, afirmando que tiene derecho a decidir cómo usar su tiempo. Una fuente cercana mencionó que ella considera que “su mejor y más alto uso es donde está” y que “es un activo invaluable y eterno” para Donald Trump.
Los registros indican que Melania también recibió US$ 250,000 por otro evento de Log Cabin Republicans en diciembre de 2022. Esta suma fue uno de los tres pagos de US$ 250,000 o más que cobró ese mes, justo después de que Donald Trump anunciara su candidatura para la reelección. Uno de los eventos fue en Florida y otro en California, organizado por Grenell. Este último no respondió a las múltiples solicitudes de comentarios.
Además, Melania recibió US$ 155,000 de un super-PAC aliado a Trump llamado Make America Great Again, Again, por un discurso que dio en Palm Beach en diciembre de 2021, antes de que Trump se lanzara como candidato.
Las apariciones de Melania han sido escasas este año. Aparte de su participación con los Log Cabin Republicans, la vimos en un evento organizado por el millonario John Paulson en Palm Beach y brevemente en la Convención Nacional Republicana, aunque sin hablar como lo hizo en 2016. Hasta ahora, no hay indicios de que le hayan pagado por su aparición en el evento de Paulson.
Stephanie Grisham, exsecretaria de prensa de la Casa Blanca y ahora crítica de Trump, comentó que Melania podría estar pensando: “Si voy a dedicar mi tiempo, me pagarán por esto”. En la Casa Blanca, Melania ya mostraba inquietudes sobre cómo otros lucraban con su imagen. Por ejemplo, en 2018 pidió a su personal que impidiera la venta de souvenirs relacionados con ella sin su permiso.
Las declaraciones financieras de Donald Trump también revelan que Melania ganó más de US$ 330,000 el año pasado por un acuerdo de licencia para vender tarjetas coleccionables digitales (NFT). Además, su sitio web comercializa joyas y otros artículos de colección.
La ex primera dama planea lanzar sus memorias el próximo mes y tiene programada una gira de promoción independiente de la campaña. En algunos videos breves que ha compartido, tocó temas poco comunes como el intento de asesinato de su esposo, los resultados de las elecciones de 2020 y su carrera como modelo.
Por si fuera poco, no es solo Melania quien ha cobrado en el ámbito político. Kimberly Guilfoyle recibió US$ 60,000 por su discurso presentando a su prometido, Donald Trump Jr., en el mitin “Stop the Steal” el 6 de enero de 2021, justo antes de la insurrección en el Capitolio.
Los honorarios por discursos y apariciones de exfuncionarios no son algo raro. Bill y Hillary Clinton, por ejemplo, ganaron más de US$ 153 millones en discursos desde 2001 hasta 2016. Barack Obama, por su parte, recibió US$ 400,000 por un discurso en Wall Street en 2017, y Joe y Jill Biden sumaron US$ 15.6 millones en contratos de libros y discursos antes de lanzarse a la carrera presidencial.
Sin embargo, representantes de figuras como Jill Biden y Michelle Obama afirman que no han cobrado por ninguna aparición en eventos de recaudación durante campañas políticas.
Este año, la recaudación de fondos de Log Cabin Republicans fue un éxito. Grenell compartió en X que la ex primera dama “abrió su ático en Nueva York para recaudar fondos” y que lograron reunir US$ 1.4 millones en una noche. “Nuestro objetivo es conseguir el 50% del voto homosexual para Donald Trump”, agregó.
En el evento de abril en Mar-a-Lago, donde Melania habló, se lanzó el programa “Road to Victory” para atraer a votantes en estados indecisos, según Politico.
