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La violencia en Monterrey se intensifica tras el hallazgo de tres narcomantas firmadas por el Cártel del Noreste (CDN), que aparecieron en diversos puntos de la ciudad luego de un operativo conjunto que resultó en la muerte de 11 presuntos delincuentes en el municipio de Los Ramones, Nuevo León. Este mensaje de advertencia dirigido a los grupos criminales locales marca un nuevo capítulo en la guerra entre el CDN y las autoridades.
El 25 de septiembre, un operativo de las fuerzas de seguridad, incluyendo al Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y la Fuerza Civil, dio lugar a un enfrentamiento que culminó con la neutralización de 11 personas y la captura de un hombre armado. Este despliegue tuvo lugar en respuesta a un ataque ocurrido horas antes en la Comandancia de General Terán, donde un grupo armado disparó contra la fachada del edificio.
Las narcomantas, atribuidas a la Operativa La Silla del CDN, fueron colocadas en sitios estratégicos de Monterrey, como la avenida Colón y Venustiano Carranza, el Mercado Campesino y el barrio “El Pozo” en la Colonia Industrial. En ellas, el Cártel del Noreste advirtió que la guerra ha comenzado y exigió a los grupos locales alinearse con ellos o apartarse. Este mensaje refleja la escalada de violencia que amenaza con extenderse por toda el área metropolitana.
El enfrentamiento en Los Ramones ocurrió luego de una serie de patrullajes en varios municipios, incluyendo General Terán, Los Herrera y Cerralvo, donde se detectó un convoy de ocho camionetas con hombres armados. Al ser descubiertos por las autoridades, intentaron huir, lo que desencadenó una persecución que culminó en un intenso tiroteo. Las fuerzas de seguridad lograron incautar seis vehículos, incluidas camionetas tipo pick-up, una de ellas incendiada, así como 11 armas largas y equipo táctico.
Los acontecimientos ocurridos en Monterrey y sus alrededores subrayan la creciente influencia del Cártel del Noreste en la región. La violenta advertencia de este grupo armado pone en evidencia la difícil tarea de las autoridades para frenar la expansión de estos grupos criminales, cuyas acciones continúan sembrando terror entre la población.
Mientras las investigaciones avanzan, los indicios recolectados por la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León, incluidos armamento y equipo táctico, serán cruciales para desmantelar a las células responsables de estos enfrentamientos, que parecen estar lejos de concluir.
