En Tetelcingo, Cuautla, Morelos, el renombrado autor José Agustín Ramírez se encuentra enfrentando un delicado estado de salud, siendo acompañado en todo momento por su familia. El reconocido escritor, conocido por obras como “La tumba” y “Tragicomedia mexicana”, ha dejado de alimentarse, presentando una marcada debilidad.
Su esposa, Margarita Bermúdez, compartió su preocupación al revelar que José Agustín ha perdido el interés por la ingesta de alimentos, lo que ha afectado significativamente su energía y vitalidad. En una entrevista con El Sol de Cuautla, Bermúdez enfatizó la importancia de la unidad familiar durante este difícil momento, destacando el apoyo constante al autor de “Ciudades desiertas”.
Nacido el 19 de agosto de 1944 en Acapulco, Guerrero, José Agustín Ramírez es recordado como un destacado precursor del movimiento literario conocido como “La Onda”, surgido en México en la década de 1960. Este movimiento literario representó una rebelión de escritores jóvenes contra los modelos tradicionales de excelencia literaria.
En un evento reciente que marcó el relanzamiento de la obra completa de José Agustín, el también escritor Enrique Serna elogió la contribución del autor a la expresión literaria y destacó su capacidad para capturar la esencia de su época. Serna subrayó que Agustín brindó a las nuevas generaciones un ejemplo de cómo encontrar un camino propio en el ámbito literario.
José Agustín ha enfrentado desafíos de salud en el pasado, notoriamente después de un accidente en 2009, cuando cayó del escenario del Teatro de la Ciudad de Puebla, sufriendo una fractura de cráneo y costillas. Desde entonces, ha utilizado una silla de ruedas como medio de transporte.
A través de las redes sociales, su hijo, José Agustín Ramírez Bermúdez, ha solicitado el apoyo y las oraciones de los lectores para la pronta recuperación de su padre. En un video reciente compartido en línea, se puede ver al escritor descansando en una cama, rodeado de su familia, mientras su hijo expresa la gravedad de la situación y el deseo de que la obra de José Agustín continúe brillando para el disfrute de sus lectores.