Una mala jugada en una construcción particular puso en riesgo a vecinos de la colonia Francisco I. Madero, en Tulancingo, y obligó a cerrar temporalmente la calle Soto Mayor, luego de que el terreno comenzara a reblandecerse peligrosamente.

El secretario de Desarrollo Urbano, Obras Públicas y Medio Ambiente, Armando Pérez Alcíbar, explicó que todo esto comenzó por una excavación mal ejecutada durante la construcción de una vivienda. El responsable rebasó por mucho los límites autorizados: tenía permiso para excavar hasta metro y medio, pero terminó haciendo un hoyo de más de 4 metros, lo que provocó que la banqueta se viniera abajo. ¿La razón? Solo contaba con un muro de contención de 1.20 metros, claramente insuficiente para soportar ese exceso.
A petición directa de la presidenta Lorena García Cázares, el área de Desarrollo Urbano dio seguimiento inmediato al caso por el riesgo que representa para la seguridad de los vecinos. Y no solo se dañó la vía pública: una vivienda contigua también resultó afectada, lo que encendió aún más las alarmas.
Ante esta situación, la calle Soto Mayor quedó clausurada de manera temporal, mientras se espera que el particular asuma su responsabilidad y repare los daños ocasionados.
Además, la Secretaría de Desarrollo Urbano ya preparó un dictamen técnico que será entregado a la dirección jurídica del ayuntamiento, con el objetivo de que se tomen medidas legales y se recupere lo afectado, incluyendo infraestructura y equipamiento público.
Lo que sí quedó claro, según el informe, es que esto no tiene nada que ver con fallas geológicas. Todo fue resultado de una ejecución indebida por parte del constructor, por lo que ahora toca dar la cara y arreglar el problema.