La senadora Cynthia López Castro ha renunciado al Partido Revolucionario Institucional (PRI) tras 21 años de militancia, sin descartar la posibilidad de integrarse a la bancada de Morena en el Senado. Con esta decisión, el grupo parlamentario del PRI en la Cámara Alta queda reducido a 14 miembros, reflejando una tendencia de desintegración dentro del partido.
La renuncia de López Castro se produce apenas unos días después de su notoria intervención en la sesión de la Cámara Alta, donde argumentó en contra de una polémica reforma constitucional promovida por Morena que restringe la posibilidad de impugnar enmiendas a la Constitución. A pesar de su encendido discurso, la senadora no participó en la votación, lo que generó controversia y rumores sobre un posible acuerdo con Morena para facilitar la aprobación de la reforma. López Castro afirmó, sin embargo, que su ausencia fue por problemas de salud, mencionando una baja de presión.
Durante su anuncio oficial, López Castro expresó que ya no se siente alineada con los principios del PRI, afirmando que ya no encuentra comodidad en el partido. Esta declaración ha sido vista como un indicio de su creciente distanciamiento ideológico del PRI y su potencial acercamiento a Morena.
La reciente reforma constitucional, que fue aprobada tras una compleja maniobra de Morena para garantizar los votos necesarios, buscaba evitar que las reformas constitucionales pudieran ser impugnadas o revertidas. La sesión estuvo marcada por manifestaciones caóticas, con gritos, pancartas y hasta sirenas de megáfonos en pleno debate. Desde la tribuna, López Castro lanzó críticas contundentes, advirtiendo que esta reforma otorga al oficialismo un poder sin contrapesos, permitiendo cambios profundos, incluso en elementos fundamentales como el nombre del país, sin posibilidad de apelación.
La aprobación se dio bajo condiciones controvertidas, ya que Morena necesitaba reducir el quórum presente en el pleno para asegurar la votación de dos tercios. La ausencia de Ricardo Sheffield, otro senador de Morena en desacuerdo con su partido, dejó el pleno con solo 127 legisladores, y tras la salida de López Castro, quedó el número necesario para lograr la aprobación con 84 votos.
En su partida, López Castro fue contundente en señalar que el PRI, bajo la dirección de Alejandro Moreno, enfrenta una fuga de miembros clave. Recordó que, tras las elecciones de junio, el PRI contaba con 16 senadores, y ahora, debido a su renuncia y la salida de otros miembros como Manlio Fabio Beltrones, el grupo se ha reducido aún más, sugiriendo que el éxodo podría continuar en los próximos meses.