José Luis Guerrero Méndez, asesor de la Jefatura de Gabinete del Gobierno de Guanajuato, ha sido destituido de su cargo después de que se descubriera que su esposa fue beneficiada con 224 contratos directos, valorados en más de 84 millones de pesos, durante la actual administración. El gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo ha señalado que se llevará a cabo una investigación para determinar si existió conflicto de intereses y que se sancionará a los responsables si se confirma alguna irregularidad.

El escándalo salió a la luz tras una investigación periodística que reveló cómo familiares de Guerrero Méndez tejieron una red de empresas y prestanombres para obtener contratos gubernamentales. Ante esto, el gobernador destacó la importancia de que las instancias correspondientes, como la Auditoría Superior del Estado y la Secretaría de Transparencia, revisen el caso en profundidad.
Rodríguez Vallejo, quien se encontraba en Manuel Doblado durante una gira de trabajo, indicó que la separación del cargo de Guerrero Méndez era necesaria para que se inicie una investigación imparcial. El funcionario aseguró que su administración actuará con firmeza ante cualquier acto de corrupción que afecte la confianza ciudadana.
Por otro lado, la Auditoría Superior del Estado ha enfrentado una sacudida adicional, ya que su titular, Javier Pérez Salazar, presentó su renuncia el mismo día que se destapó el escándalo, alegando motivos personales, lo que ha generado aún más sospechas en torno a este caso.