El tradicional desfile por el aniversario de la Revolución Mexicana se llevó a cabo este 20 de noviembre en la Ciudad de México, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum. Durante el evento, la mandataria resaltó los avances de la llamada Cuarta Transformación y la importancia histórica de esta conmemoración, que marca 114 años desde el inicio del conflicto armado que definió el rumbo del país.
Sheinbaum dio inicio al desfile desde el Zócalo capitalino, destacando que México es uno de los pocos países que ha vivido múltiples transformaciones sociales y políticas. La presidenta señaló que el país está en la segunda etapa de la Cuarta Transformación, subrayando cambios como la elección de jueces y magistrados y el fortalecimiento de los derechos de las mujeres en la Constitución. Aseguró que el mundo observa con admiración los avances de México y destacó la resiliencia del pueblo mexicano.
El desfile contó con la participación de más de dos mil integrantes de las Fuerzas Armadas, la Guardia Nacional, pueblos originarios, niños y niñas, además de caballos, locomotoras y escenografías alusivas a momentos clave de la Revolución Mexicana. Se representaron episodios históricos como la firma del Plan de San Luis y los Tratados de Ciudad Juárez, buscando resaltar el legado de los revolucionarios.
El secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Treviño Trejo, también participó en el evento y subrayó el papel de las mujeres en la Revolución Mexicana y su impacto en el desarrollo actual del país. Destacó que hoy en día, las mujeres ocupan posiciones clave, incluida la Presidencia de la República, y elogió el liderazgo de Sheinbaum como comandanta suprema de las Fuerzas Armadas.
Sin embargo, la celebración no estuvo exenta de críticas. A pesar de los esfuerzos por destacar logros recientes, persisten cuestionamientos sobre los resultados tangibles de la administración actual en temas como seguridad y economía, lo que algunos analistas consideran un contraste con los ideales revolucionarios de igualdad y justicia social.
El desfile, que comenzó en el Zócalo y concluyó en el Campo Marte, recorrió avenidas emblemáticas de la capital como Paseo de la Reforma. Aunque el evento fue ampliamente promovido, generó inconvenientes para los ciudadanos debido a los cierres viales en la zona centro y poniente de la ciudad.
La conmemoración de la Revolución Mexicana sigue siendo una fecha significativa para reflexionar sobre el pasado y el presente de México, pero también plantea interrogantes sobre si las promesas de transformación realmente se están cumpliendo en beneficio de todos los mexicanos.