Este miércoles 9 de octubre, la administración de Claudia Sheinbaum inició el debate sobre la reforma constitucional en el ámbito energético, basada en el proyecto del expresidente López Obrador. La propuesta busca modificar tres artículos de la Constitución para fortalecer el control estatal sobre Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), alejándolos de su enfoque productivo para centrarse en un rol social.
Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum explicó los cambios junto a Luz Elena González, destacando que Pemex y CFE dejarían de operar bajo el derecho mercantil. Además, la reforma establece que la explotación del litio será una prerrogativa exclusiva del Estado, mientras que la CFE deberá producir al menos el 54% de la energía del país, con los privados limitados al 46%.
Sheinbaum enfatizó que la reforma busca restablecer el carácter público de estas empresas, priorizando el servicio público sobre las reglas del mercado. Señaló que la preponderancia de la CFE se fortalecerá, incluso permitiendo a las hidroeléctricas participar más activamente en la generación de energía limpia, un cambio que la Constitución actual no favorece.
En la Cámara de Diputados, donde Morena y sus aliados tienen mayoría, se convocó una sesión ordinaria para discutir el proyecto de decreto que reforma los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución en relación con las áreas y empresas estratégicas.
Hasta el mediodía de este miércoles, la sesión aún no había comenzado, aunque se esperaba que el debate arrancara más tarde.
4o