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La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México confirmó que siete ciudadanos mexicanos perdieron la vida en un accidente de autobús en Mississippi, Estados Unidos, el 31 de agosto. El vehículo volcó en una carretera, causando también varios heridos, lo que ha generado preocupación sobre la seguridad en el transporte público en ese país.
El consulado de México en Houston ha ofrecido apoyo a las familias de las víctimas, asistiendo en la repatriación de los cuerpos y proporcionando asesoría legal. Las autoridades locales están investigando las causas del accidente, mientras la comunidad mexicana en Estados Unidos ha mostrado su solidaridad con los afectados.
Testigos del incidente reportaron que el autobús, que transportaba principalmente a trabajadores migrantes, podría haber experimentado un fallo mecánico antes de volcarse. Este tipo de accidentes subraya la necesidad de revisar las condiciones de los vehículos utilizados para el transporte de trabajadores migrantes, quienes a menudo enfrentan condiciones de viaje peligrosas.
La SRE también ha llamado a las autoridades estadounidenses a garantizar que las empresas de transporte cumplan con los estándares de seguridad necesarios para evitar tragedias similares en el futuro. Esta no es la primera vez que un accidente de este tipo involucra a ciudadanos mexicanos, lo que ha incrementado la preocupación por la seguridad de los migrantes en su tránsito por Estados Unidos.
Además, organizaciones de derechos humanos han pedido una mayor supervisión de las condiciones en las que viajan los migrantes, quienes frecuentemente dependen de medios de transporte con estándares de seguridad cuestionables. La tragedia en Mississippi pone de relieve los riesgos que enfrentan diariamente los trabajadores migrantes en su búsqueda de mejores oportunidades.
