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El Fiscal de Morelos, Uriel Carmona, quien había recuperado su libertad tras ser acusado de complicidad en un caso de feminicidio, se vio sorpresivamente detenido nuevamente al abandonar la prisión de Almoloya en el estado de México. Esta vez, enfrenta acusaciones de tortura por parte de la Fiscalía Anticorrupción de Morelos, y su destino apunta al penal de Atlacholoaya.
Horas previas a su liberación, el Juzgado Cuarto de Distrito de Amparo en Materia Penal de la Ciudad de México había notificado a las autoridades de Altiplano sobre la orden del Séptimo Tribunal Colegiado en materia Penal, que dictaminó su inmediata puesta en libertad y la continuación de su proceso en libertad, en relación a su presunta implicación en el delito de feminicidio.
Sin embargo, su liberación fue efímera, ya que a su salida del penal, Uriel Carmona se encontró nuevamente bajo arresto, esta vez enfrentando graves cargos de tortura, lo que ha dejado a muchos perplejos y plantea interrogantes sobre el complejo proceso legal que rodea a este caso.
El Fiscal de Morelos se mantiene en el centro de la controversia judicial, con las acusaciones y las decisiones judiciales que lo mantienen en una constante montaña rusa legal. La noticia de su detención nuevamente ha generado un gran interés mediático y una creciente incertidumbre sobre su futuro legal.
