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Esta semana, las calles de Nueva York se llenaron de manifestantes tras la difusión de un video del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) que muestra un tiroteo en el que resultaron heridos dos transeúntes. El incidente involucra a un hombre, Derrell Mickles, de 37 años, quien estaba armado con un cuchillo y había evadido el pago del metro.
El domingo, todo comenzó cuando Mickles saltó el torniquete del metro, evitando una tarifa de US$ 2.90, frente a dos agentes de patrulla de tránsito que estaban en la entrada de una estación en Brooklyn. Según la policía, los oficiales lo persiguieron hasta la plataforma, donde le pidieron repetidamente que soltara el cuchillo, pero él se negó a cooperar.
En el video editado por el NYPD, se ve a Mickles tratando de escapar en un vagón del metro mientras los agentes intentan desplegar sus pistolas paralizantes sin éxito. Después de una breve persecución, Mickles se encuentra acorralado y, en un momento crítico, los oficiales disparan múltiples veces, provocando que cayera dentro del vagón.
La policía sostiene que los disparos solo ocurrieron después de que Mickles los atacara. El comisionado adjunto del NYPD, Kaz Daughtry, explicó en redes sociales que los agentes intentaron calmar la situación pidiendo al sospechoso que soltara el cuchillo más de 30 veces.
Desgraciadamente, dos transeúntes y un oficial resultaron heridos por las balas. Se informó que uno de los transeúntes recibió un disparo en la cabeza debido a una bala perdida. Mickles fue arrestado y enfrentará cargos por asalto agravado a un oficial con un arma mortal, entre otros delitos. Se declaró inocente durante su procesamiento el viernes.
El jefe de patrulla del NYPD, John Chell, subrayó en una conferencia que este no fue un caso de evasión de tarifas, sino una situación en la que una persona con problemas de salud mental estaba armada. Sin embargo, defensores públicos y residentes de Nueva York están en desacuerdo con esta narrativa.
El grupo Legal Aid Society expresó su inquietud sobre las imágenes, señalando que no reflejan la realidad del caos vivido durante el incidente y contradicen la afirmación del NYPD de que Mickles atacó a los oficiales. “El video muestra claramente que Mickles estaba quieto cuando el NYPD abrió fuego”, señala su comunicado.
Las protestas continúan, reflejando una creciente preocupación por el uso excesivo de la fuerza por parte de la policía en la ciudad.
