En lo que va del 2024, Hidalgo ha registrado tres muertes maternas, y lo más preocupante es que una de ellas ocurrió sin que la paciente tuviera atención médica previa. Así lo reportó la Secretaría de Salud federal, y encendió las alarmas sobre la necesidad urgente de reforzar el seguimiento durante el embarazo.

La última tragedia se reportó a finales de abril, cuando una mujer falleció sin haber pisado un hospital, ya sea público o privado. Esto representa el 21.4 % de las 14 muertes maternas que se han registrado en el estado en lo que va del año, según el informe más reciente de la Dirección General de Epidemiología (DGE).
De acuerdo con la DGE, la primera muerte del año sucedió en enero en un hospital del IMSS Bienestar, mientras que la segunda ocurrió en marzo, también dentro de una unidad médica del mismo instituto. Pero fue el tercer caso, sin intervención médica, el que más ha generado preocupación entre las autoridades.
A nivel nacional, ya van 163 muertes maternas contabilizadas antes, durante o poco después del parto. El Estado de México lidera la lista con 22 casos, seguido por Chiapas con 18, Jalisco con 12, CDMX con 11, y Veracruz con 9. Puebla y Tamaulipas tienen 8 defunciones cada uno. El resto de las entidades reportan entre 1 y 7 fallecimientos.
Sobre las causas, los principales factores que han provocado estas muertes son: hipertensión, edema y proteinuria durante el embarazo o el posparto (12.9%), seguido por abortos (12.3%), hemorragias obstétricas (11.7%), y embolias obstétricas (5.5%), entre otras complicaciones.
Ante este panorama, el IMSS Bienestar en Hidalgo hizo un llamado a las futuras mamás para que no dejen de acudir a sus chequeos prenatales. Señalan que la hemorragia obstétrica y la preeclampsia son de las causas más comunes y peligrosas durante el embarazo, por lo que llevar un control médico regular puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte.