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En una sesión extraordinaria celebrada ayer por la tarde, los miembros del Ayuntamiento de Tula aprobaron por unanimidad el presupuesto de egresos para el ejercicio fiscal 2023, a pesar de las observaciones presentadas por la comisión de hacienda del cabildo respecto a la segunda modificación al documento.
Se destacó que un vehículo de bomberos, donado a la presidencia municipal de Tula, fue registrado como gasto en el informe oficial presentado.
Asimismo, se informó que la recaudación propia del Ayuntamiento experimentó una disminución significativa el año pasado. La meta presupuestada para recursos propios fue de 107 millones de pesos, pero solo se logró recaudar alrededor de 81 millones de pesos, lo que representa una diferencia de aproximadamente veintiséis millones de pesos.
El regidor Ricardo Baptista expresó su preocupación por el hecho de que el vehículo de bomberos donado por Pemex al Ayuntamiento se haya incluido como un gasto. Baptista cuestionó estas prácticas después de que el alcalde Mario Francisco Guzmán recibiera el automotor como donación.
“Es necesario realizar un análisis detenido del dictamen”, señaló Baptista durante la sesión extraordinaria.
El regidor también destacó el fracaso de la alcaldía tulense en la recaudación de recursos propios para el año 2023, atribuyéndolo al hecho de que gran parte de la ciudadanía no pagó su impuesto predial.
Baptista subrayó la dificultad del Ayuntamiento para llevar a cabo más acciones en este ámbito, lamentando que los ciudadanos no hayan cumplido con sus obligaciones fiscales, lo que afecta la capacidad de las autoridades locales para financiar proyectos y ofrecer servicios públicos de calidad.
Por su parte, la regidora Araceli Rivera Díaz comentó que, aunque el dictamen en general fue fruto de un trabajo exhaustivo, se realizaron observaciones debido a pagos que aparentemente se llevaron a cabo sin los procedimientos adecuados ni justificación. La contraloría será la encargada de revisar detalladamente estos aspectos.
En última instancia, el presidente municipal Francisco Guzmán aseguró que el dictamen fue elaborado con transparencia, tanto en sus aspectos positivos como negativos. La contraloría del estado ya ha iniciado una investigación para garantizar que las solicitudes de los ciudadanos tulenses no se vean afectadas.
