Parece que este año, la Central de Autobuses de Pachuca se quedó sin apoyo en plena temporada vacacional, ya que, por primera vez, no se instaló ningún módulo de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco). Esto ha dejado a los pasajeros completamente desprotegidos frente a posibles abusos por parte de las empresas de autobuses en la época de mayor afluencia.
¿Dónde está el personal?
Normalmente, el personal de la Profeco está presente en el acceso principal para atender quejas y problemas, pero este año… ¡nada! Según los trabajadores de las taquillas, la Profeco “se fue de vacaciones”. Y esto ha dejado espacio para ciertos abusos, como la negativa de descuentos a estudiantes y maestros, o la falta de reembolsos cuando los autobuses se retrasan hasta 3 o 4 horas.
Problemas a la vista para los usuarios.
Las empresas de transporte argumentan que estos retrasos son simplemente parte de los “gajes del oficio”, ya que el tráfico en carretera puede ser impredecible. Pero, a ver… eso no es problema de los pasajeros, quienes ya pagaron por un servicio que esperan puntual.
¿Qué está haciendo la Profeco?
Con todo esto, ningún caso ha sido atendido por la negligencia de la titular de la Profeco en Hidalgo, dejando a los viajeros sin respuesta en estos días de alta demanda.