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Renato Alarcón, exdirigente estatal del PRI en Veracruz, ha decidido poner fin a su militancia en el partido y, de manera categórica, proclama la muerte del priismo. En una carta dirigida al Comité Estatal del PRI, Alarcón señala que el partido ha perdido su esencia y lamenta haber presenciado el declive, especialmente durante el liderazgo de Alejandro Moreno Cárdenas.
“Hoy ese PRI no existe; murió. Asistí a su entierro cuando permitimos que Alejandro Moreno Cárdenas se quedara en la Presidencia del Partido; debimos haberlo sacado a empujones, como él saca a quien le estorba”, expresó Alarcón de manera contundente.
En su mensaje de renuncia, Alarcón revela su sorpresa al encontrarse fuera del partido que siempre soñó con dirigir desde joven. Destaca que tuvo la oportunidad de liderar a nivel municipal y estatal, pero la realidad actual del PRI lo ha llevado a tomar la decisión de abandonar su militancia.
“Verdaderamente me duele dejar mi militancia, pero lo hago consciente de que no puedo seguir siendo parte de las farsas locales y nacionales”, añadió.
Alarcón evoca la época en la que el PRI se destacaba por su diversidad de opiniones y corrientes internas. Sin embargo, lamenta que el partido se haya transformado en una pandilla bajo el liderazgo de Moreno Cárdenas, donde la discrepancia es vista como traición.
“El PRI era grande porque todos podíamos opinar y estar presentes; los que gobernaban y los que no; los que pensaban de una manera u otra. El PRI nos aglutinaba”, recordó Alarcón.
En su despedida, el exdirigente rechaza la etiqueta de traidor y acusa a Alejandro Moreno Cárdenas de comportarse como un dictador dentro del PRI, señalando que aquellos que no están alineados con la línea del líder son considerados víctimas de su marrullería política.
