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El gobierno mexicano confía en que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya responsabilice al Estado ecuatoriano por el asalto a la embajada mexicana en Quito. La canciller Alicia Bárcena aseguró que México presentará una demanda para buscar la condena internacional por este acto.
La llegada de la embajadora Raquel Serur y su equipo diplomático a México fue recibida con la noticia de que se llevará a cabo una acción legal contra Ecuador por violar el derecho internacional. Bárcena destacó que el ex vicepresidente ecuatoriano Jorge Glas continúa siendo un asilado político en México.
Además, la cancelación de relaciones diplomáticas con Ecuador conlleva la revisión de los programas de apoyo a migrantes ecuatorianos repatriados y la congelación de las conversaciones sobre comercio internacional. La canciller expresó que ante la gravedad de la situación, mantener estos programas es difícil.
Bárcena elogió el regreso seguro de la misión mexicana en Ecuador, compuesta por 18 personas y sus familias, mientras destacaba la unidad de las fuerzas políticas mexicanas en la defensa de la patria.
En cuanto al asilo otorgado a Jorge Glas, la cancillería aseguró que se basó en un análisis minucioso y rechazó que se haya infringido cualquier convención internacional. Subrayó que la decisión de otorgar asilo político es un derecho que corresponde a México como país otorgante.
México no planea expulsar al personal diplomático ecuatoriano y está comprometido con atender a los mexicanos residentes en Ecuador, así como a las empresas importantes con presencia en el país. Se brindará apoyo a través del Sistema de Registro para Personas Mexicanas en el Exterior y las embajadas mexicanas en Chile, Colombia y Perú.
Tras el allanamiento de la embajada, los funcionarios permanecieron en el edificio hasta ser acompañados al Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre de Quito por varios embajadores extranjeros, antes de abordar un vuelo de Aeroméxico que los llevó de regreso a la Ciudad de México.
