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Los costos de los elementos esenciales para los ciudadanos experimentaron un ascenso continuado.
La tasa de inflación general registró un incremento en el tercer mes del presente año, alcanzando un ajuste del 4.42 por ciento, siendo esta la cifra más elevada desde enero de 2023. Este incremento fue impulsado por el alza en los precios de los servicios, así como de los productos alimenticios, tales como frutas y verduras, según revela el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Este aumento en la inflación se vio motivado por las presiones provenientes del ámbito internacional que han impactado en la región estatal, sumado a la prolongada sequía que ha afectado a gran parte del territorio nacional.
De acuerdo con el INPC, los precios de los alimentos experimentaron un aumento del 5.02 por ciento, mientras que los servicios mostraron un incremento del 5.37 por ciento en términos mensuales. Por otro lado, los costos de las colegiaturas descendieron un 0.02 por ciento y los de la vivienda un 0.38 por ciento, siendo estos los rubros con menores incrementos de precios.
Al respecto, Jonathan Heath, subgobernador del Banco de México (Banxico), señaló que los precios de los alimentos han experimentado un ascenso de forma sistemática en los últimos meses, aunque considera que este incremento ha sido menor al esperado.
El economista prevé que durante la segunda mitad del año en curso, los precios de los insumos para los consumidores, especialmente en el rubro de alimentos como frutas y verduras, que han mantenido un incremento sostenido, podrían ajustarse.
Desde el inicio de la pandemia de Covid-19 en marzo de 2020, los precios de los productos para los consumidores han experimentado un incremento constante, alcanzando su nivel más alto en julio de 2022, cuando se situaron en un 8.63 por ciento, cifra no vista desde diciembre de 2000. Durante el año pasado, se observó una desaceleración en este fenómeno.
