amaneciendo.com.mx Tu ventana al mundo
Kayaköy, una joya escondida en la provincia de Muğla, al suroeste de Turquía, es un enigma congelado en el tiempo. Imagina una gran escuela, calles angostas serpenteando por un valle escarpado y antiguas iglesias con vistas al brillante mar Egeo. Sin embargo, durante gran parte del último siglo, este lugar ha estado deshabitado.
En el pasado, Kayaköy, conocida anteriormente como Levissi, era una vibrante ciudad con una población de más de 10,000 cristianos ortodoxos griegos. Estos vivían en paz junto a los agricultores musulmanes turcos. Pero la agitación que acompañó la formación de la Turquía moderna cambió drásticamente el destino de la ciudad. La guerra greco-turca de 1922 y las tensiones subsiguientes llevaron a un intercambio forzoso de poblaciones, dejando a Kayaköy en ruinas.
Los griegos cristianos ortodoxos fueron desplazados y se les reemplazó por musulmanes turcos de Kavala, en Macedonia y Tracia, Grecia. Los nuevos habitantes no se adaptaron bien y pronto abandonaron la ciudad, dejando a Kayaköy a merced del tiempo y la naturaleza.
En la actualidad, la ciudad está llena de edificios en ruinas que lentamente se están cubriendo de verde. La belleza austera de Kayaköy es a la vez fascinante y desoladora, especialmente bajo el sol abrasador del verano o envuelta en la niebla de las estaciones frías.
Los visitantes pueden pagar una pequeña tarifa en un quiosco antes de explorar las ruinas de Kayaköy. Aunque algunas casas han perdido sus techos y se están desmoronando, otras aún conservan cisternas esenciales para la vida diaria. Las paredes, en su mayoría desmoronadas, muestran restos del color azul que solían pintarse para ahuyentar a escorpiones y serpientes.
Aysun Ekiz, descendiente de una de las pocas familias turcas que se quedaron en Kayaköy, dirige un pequeño restaurante cerca de la entrada. Ella cuenta cómo los griegos lloraban por abandonar su hogar y cómo algunos incluso dejaron a sus hijos con amigos turcos con la esperanza de regresar. Sin embargo, nunca lo hicieron.
Jane Akatay, autora de “A Guide to Kayaköy”, menciona que los desastres naturales, como terremotos y tormentas, también han contribuido a la ruina de la ciudad. El deterioro de los edificios y el clima han jugado su parte en el estado actual de Kayaköy.
Yiğit Ulaş Öztimur, un visitante de Ankara, describe Kayaköy como un “reflejo amargo de nuestro pasado”. A pesar de su estado actual, la ciudad aún ofrece vistas espectaculares del mar Egeo y la oportunidad de pasear por sus calles solitarias, imaginando cómo era cuando estaba llena de vida.
Para explorar el área, se recomienda dedicar un par de horas, disfrutando del silencio y la historia que impregna este rincón olvidado del mundo. Kayaköy sigue siendo un poderoso recordatorio de un tiempo pasado y un destino intrigante para los que buscan entender los ecos de su historia.
