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El fuego que se desató desde la tarde del sábado 27 de abril en el vertedero municipal de Tlanalapa sigue sin ser contenido, las autoridades locales han solicitado asistencia a Protección Civil del estado.
Las labores para extinguir el incendio en el vertedero municipal de Tlanalapa están en curso y podrían extenderse a lo largo del día, así lo comunicaron la Unidad de Bomberos y Protección Civil, junto con la Policía Municipal, quienes colaboran en conjunto para sofocar el incendio en el tiradero a cielo abierto, que fue clausurado por la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proespa) en marzo de este año.
Osiris Aguirre y Carlos Benítez, a cargo de los organismos mencionados, señalaron que el principal desafío en este momento radica debajo de la superficie, donde todavía arden residuos altamente inflamables. Es por ello que desde ayer, con el respaldo de los cuerpos de Bomberos de Emiliano Zapata y la Delegación Pirámides del Estado de México, se han organizado brigadas para sofocar el incendio.
La concentración elevada de gases en las capas profundas de la basura ha complicado las operaciones para controlar el fuego, por lo que se ha solicitado ayuda a Protección Civil del estado. Se espera que, con la asistencia de máquinas retroexcavadoras y brigadistas, se pueda trabajar en puntos estratégicos para extinguir el fuego.
Los líderes de Bomberos y la Policía Municipal reconocieron también la colaboración de la Policía Estatal, Delegación Ciudad Sahagún, liderada por Cándido Oropeza, así como de voluntarios de colonias cercanas y repartidores de agua en pipa, quienes han contribuido con el suministro de agua para las operaciones de extinción.
Además, se ha informado que debido a las características del incendio, probablemente fue provocado, y dada su magnitud, el personal disponible no es suficiente para evitar que el fuego se propague por todo el terreno, estimado en aproximadamente 200 metros cuadrados.
Ante la magnitud del incendio, brigadistas de municipios vecinos se sumaron al protocolo contra incendios desde la noche anterior.
Por último, se ha informado que el fuego ha arrasado gran parte del terreno debido a las intensas ráfagas de viento, las cuales han dispersado “olas de fuego y enormes columnas de humo” por toda el área, en dirección a diversas zonas residenciales.
En conclusión, una cuadrilla de aproximadamente diez efectivos ha iniciado la segunda jornada del día para extinguir el fuego, al que se espera se sume maquinaria, ya que, aunque las llamas no son visibles, siguen avanzando en la profundidad de los escombros, representando un riesgo latente de reavivamiento del incendio.
